“El agua es nuestro recurso más preciado, un ‘oro azul’ al que más de dos mil millones de personas no tienen acceso directo. No sólo es esencial para la supervivencia, sino también una cuestión sanitaria, social y cultural en el corazón de las sociedades humanas”
Audrey Azoulay, Directora General de la UNESCO
Este año el lema del Día del Agua de UNESCO es “El Valor del Agua”.
La falta de reconocimiento del valor del agua es la principal causa de su desperdicio y mal uso, según el Informe de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo de los Recursos Hídricos en el Mundo 2021, publicado por la UNESCO en nombre de ONU-Agua.
A pesar de la dificultad de asignar un valor objetivo e indiscutible a un recurso que es la base misma de la vida, parece necesario explicar las diferentes dimensiones del agua para arrojar luz sobre los distintos aspectos de su “valor”. Sobre todo en momentos en que este recurso es cada vez más escaso, en un contexto de crecimiento demográfico y cambio climático.
El valor del agua es realmente incalculable, infinito, ya que la vida no existe sin ella y no hay sustituto para ella.
El informe subraya que es esencial enriquecer la noción de “valor” del agua y que no se pueden confundir las nociones de “precio”, “coste” y “valor”.
Mientras que los dos primeros aspectos son potencialmente cuantificables, la noción de “valor” es mucho más amplia e incluye dimensiones sociales y culturales.
El agua no es una materia prima que pueda tratarse como un producto de consumo y negociarse en el mercado de valores. El reto consiste en asignar un valor justo a un recurso cuya importancia varía según los ámbitos de la actividad económica y los periodos, y que tiene en cuenta su dimensión social, medioambiental y cultural.
Fuente: https://es.unesco.org